martes, 3 de marzo de 2015

Goodloe Harper Bell, PIONERO EDUCADOR


Goodloe Harper Bell
PIONERO EDUCADOR
Nació en abril de 1832 - Murió el 16 de enero de 1899

El profesor Bell fue quizá uno de los más eminentes pioneros de la denominación adventista en los primeros años de la obra educativa. "La primera obra educativa Adventista del 7º Día, fuerte, estable y progresiva comenzó con la llegada de Goodloe Harper Bell a Battle Creek en 1866" Pioneer Stories Retold. pág. 185.

En esa época este joven, casado, tenía 34 años y, al contrario de la opinión general, era mayormente un autodidacta, excepto por algunos meses que pasó en el colegio de Oberlin. Era eminente en la obra de educación pública cuando el sistema de educación pública comenzó en Michigan en aquellos días.
Su primera visita a Battle Creek fue con un amigo que llegó a ser un paciente del recién establecido Instituto de reforma pro-salud. Al año siguiente el profesor Bell volvió para someterse a un tratamiento. Le gustaban los métodos de Battle Creek y disfrutó labrando las tierras y la huerta del Sanatorio. Su salud mejoró mucho.
El colegio de Battle Creek, dedicado el 4 de enero de 1875, fue mayormente el resultado de una escuela privada iniciada por el profesor Bell en esa ciudad. Escribió varios libros de texto para el estudio del idioma inglés pero fue más conocido por sus ocho libros titulados Lecciones Bíblicas para la Escuela Sabática.
De junio de 1869 a noviembre de 1871, el profesor Bell fue editor del Youth's Instructor. Cuando se fundó el colegio de Battle Creek fue nombrado Jefe del Departamento de Inglés. Sydney Brownsberger era el director; Jaime White el presidente y Urias Smith el jefe del Departamento de Biblia.
Hubiera podido vivir hasta una avanzada edad si no hubiese sido que en 1899, a los 67 años de edad, mientras guiaba un carruaje tirado por su brioso caballo, sufrió un accidente que le causó la muerte. Miles de personas lamentaron la pérdida de este amado maestro.
Ver: La Historia de Nuestra Iglesia, págs. 364-373; El Gran Movimiento Adventista, págs. 88-92; El Movimiento Adventista , p. 150; Pioneers Stories Retold, págs. 185-192; Footprints of the Pioneers, págs. 187-194.

Una Historia Acerca de Goodloe Harper Bell
La amabilidad del profesor Bell y su amor por los jóvenes le ayudaron a fundar un colegio cristiano. Un día mientras el hermano Bell estaba trabajando en la huerta del Instituto de Salud en Battle Creek, Edson y Willie, hijos del pastor y de la Sra. White, que vivían abajo del sanatorio, en la esquina de las calles Washington y Champion, pasaron casualmente por allí y lo vieron trabajando. El simpatizaba con los problemas de los muchachos y ellos sentían cariño por él al instante. Cuando le hacían preguntas acerca del trabajo escolar, les daba respuestas claras. Realmente, podía hacerlo más sencillo que el maestro de su escuela. Así Willie y Edson regresaron rápidamente a su casa y contaron a sus papás acerca de su descubrimiento en palabras como estas: "¡Oh, papá y mamá, encontramos al hombre más maravilloso en el sanatorio! ¡Es un paciente allí. Es el mejor maestro! ¡Justo la clase de maestro que nos gustaría tener! El contestó todas nuestras preguntas y lo hizo todo tan interesante. Deseamos que pudiéramos tenerlo en nuestra escuela".
El pastor White y otros padres esperaron al profesor Bell y lo animaron a comenzar una escuela privada, cosa que hizo. Esta escuela se fue desarrollando hasta que fue tomada bajo la protección de la Asociación General. La planta baja de un viejo edificio de la Review se usó para aulas de clase y la planta alta fue transformada en un pequeño y cómodo hogar para el profesor Bell.
Dijimos que el profesor Bell era amigable, pero era también un hombre de disciplina firme. Un día estaba en una clase de retórica, un alumno llamado Dan T. Jones, que más tarde llegó a ser misionero en México y después Secretario de la Asociación General. Era un joven cuidadoso a quien le gustaba llegar a sus conclusiones solamente después de haber tenido tiempo para pensar. Era en todo sentido, un auténtico representante de Missouri, pero la retórica y el inglés eran difíciles para él. Un día llamaron su número (los estudiantes tenían un número en esos días) y él no lo esperaba. Debía leer un largo párrafo del libro de texto, pero tenía dificultades para encontrarlo. Finalmente lo encontró, pero no se puso de pie hasta haberlo encontrado. El profesor Bell no podía tolerar tal indolencia. "Sr. Jones", le dijo, "evidentemente está dormido. Alguien por favor, despiértelo".
Dan Jones contestó: "No, señor, no estoy dormido. Estoy buscando el párrafo".
El profesor Belle replicó: "¿Buscando? ¿Buscando? ¿Busca sentada la gente de Missouri? ¿Está usted demasiado débil como para pararse? ¡Empújelo! dijo, dirigiéndose al joven que estaba sentado a su lado, ¡Empújelo!".
Esa era la forma de ser del profesor Bell. Estricto y severo. Aveces excesivamente, Pero obtuvo resultados y de alguna manera los alumnos lo querían. Se necesitaba esa clase de persona para dirigir una escuela en los años 1860. Y ésa era la clase de persona que era el profesor Bell. ¿Piensa usted que es bueno que los maestros sean severos a veces?

Fuente: PM MINISTRIES
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